El GR
247 Bosques del Sur ya está señalizado, que no terminado, porque le faltan la mayoría de los
refugios, la guía, un par de puentes, varias fuentes y otras cosas menores.
También está oficialmente presentado, pero eso pertenece a otras esferas, a
otros mundos muy alejados de la lógica de los simples mortales, y que por tanto
se me escapa por completo.
Al
grano. Algunas personas, grandes amantes y conocedoras de la Sierra, han
sentido una cierta decepción al conocer el trazado del GR. Era una reacción
comprensible y previsible para las personas que hemos sido responsables de su diseño,
además de inevitable. Pero me gustaría
aclarar que el GR 247 no está pensado para los montañeros que ya han pateado
estas Sierras y las conocen bien, sino para un público mucho más amplio de
diversas edades y procedencias, con conocimientos, condiciones físicas y expectativas
muy variadas. Creo que una de las virtudes de un GR potente como este, y que cuenta con el compromiso de mantenimiento firmado por la Consejería de Medio Ambiente, es que generará –ya lo está haciendo- más demanda de
señalizar nuevos senderos que conecten los muchísimos lugares maravillosos por
los que no pasa, y eso será una buena noticia siempre que haya personas o instituciones que se echen para adelante y los hagan. Con una salvedad: algunos de esos extraordinarios lugares no deberían ser demasiado publicitados. No están señalizados por el GR 247 y espero que nunca lo estén.
Además,
el GR no agota posibilidades, sino que abre perspectivas. Por ejemplo, sería
extraordinario que los montañeros experimentados, los que mejor conocen la
Sierra -además de pastores y guardas- se tirasen al barro y
diseñasen una equivalente serrana a la HRP (Haute Randonnée Pyrénéenne, Alta Ruta Pirenaica) que fuese una
atractiva alternativa al GR 247 para la gente más experimentada y aventurera. La HRP no
es una ruta, sino un concepto: atravesar la cordillera pirenaica de mar a mar
por la parte más alta posible. No tiene señalización (o casi), sino descripciones
y mapas. Ni siquiera hay un trazado único, sino diversas alternativas según los
gustos de los montañeros.
Sería fantástico que hubiera una versión serrana de la
HRP, tal vez circular, tal vez longitudinal, tal vez uniendo la Sierra en sus
territorios albaceteños, jiennenses y granadinos… las posibilidades son muchas,
y además la inversión sería cero, ya que con los medios de los que disponemos hoy en día y la experiencia de
las personas de diversa procedencia que conocen la Sierra metro a metro, bastaría colgar la Ruta en la Red una vez diseñada, recorrida, rediseñada, cartografiada y descrita. Sería una creación cien por cien ciudadana, libre,
colaborativa, espontánea y montañera. Un terreno fértil para las sinergias. Un regalo para el amplio y variopinto mundo de la
montaña y el montañismo.
Foto: El GR 247 en la altiplanicie segureña de Los Campos de Hernán Perea - Javier Broncano Casares
Foto: El GR 247 en la altiplanicie segureña de Los Campos de Hernán Perea - Javier Broncano Casares